En la mitología también existen ejemplos de diosas que mantenían relaciones fuera del matrimonio.
Es el caso de Afrodita (que se le identifica con la diosa romana Venus), diosa del amor y símbolo del pecado carnal femenino, infiel a su marido Hefesto, con quien Zeus obligó a casarse. Los matrimonios concertados y sin opción a réplica para las mujeres también eran la tónica general de la Antigua Grecia.
Cabe destacar que Afrodita es la única Diosa de las Olímpicas que tuvo hijos con humanos o con otros dioses. El resto de ellas, o no tuvieron por voto de castidad o, como Hera, por fidelidad al matrimonio.